Abrázate al fracaso

Mientras tengas miedo a fallar, nunca podrás ser bueno con las mujeres. Siempre intentarás quedar bien ante todos, tener una salida digna, una cuerda que te salve si todo falla, una red de seguridad, esa última resistencia. Eso es tu ego, escondido. Te mantiene a salvo. Da igual que hayas avanzado hasta el final: que hables con desconocidas, que tengas muchas amigas, que vayas a citas, que consigas besos… parece que has mejorado bastante, pero esa última resistencia te impide volar alto, sin ataduras.

Sólo podrás ser realmente bueno con ellas cuando dejes marchar tu última resistencia. Cuando tires tu última defensa y abraces el fracaso. Cuando te lances al vacío, sin protección, sin vuelta atrás. Si caes no habrá cuerda que te salve. Te darás el tortazo contra el suelo. Fracasarás. Y con un poco de suerte, podrás levantarte y llevarlo con dignidad, como un hombre.

Nunca queremos fallar. Deja de intentar hacerlo todo perfecto y deja de disimular tus deseos. No te avergüences de ser un hombre. Si deseas quedar con ella en una cita, díselo. Si la tienes delante y quieres besarla, muévete a por el beso. Deja de esperar que ella dé el paso, porque no lo hará. Expresa lo que deseas, como un hombre. Con un par de pelotas. Honestidad. Di tu verdad. No te reprimas.

Si acabas de conocer a una chica, no le pidas el número para llamarla otro día. Consigue la cita allí mismo para ese mismo día o para otro. Dile directamente: “¿Qué vas a hacer esta noche? Vente con nosotros, lo pasaremos genial!!”, “¿Qué haces los próximos 5 minutos? Vayamos a tomar algo!!”

Si realmente quieres ir a una cita con ella, no le digas de modo débil: “A ver si nos vemos pronto” o “¿El fin de semana estás libre? podríamos quedar.” Dilo como un hombre, liderando: “Tengo una idea estupenda. El viernes por la noche, vamos a dar un paseo tomando un helado. Una cita, como en los viejos tiempos!! ¿Qué es toda esa chorrada sin sentido de los cafés? ¿A qué hora sales el viernes?”😉

Sí. Fallarás unas cuantas veces. Y puede que estrepitosamente. Pero la experiencia que acumularás y el hecho de estar actuando como un hombre valiente, con coraje, entregándote totalmente al mundo en cada interacción, dando el todo por el todo, hasta las últimas consecuencias, te regalarán una descarga de adrenalina y una excitante sensación de libertad. Y dejarás de tener amiguitas en el facebook y empezarás a tener citas de verdad con mujeres…

“En el riesgo está el placer.” – James Bond

“Para conseguir a una mujer tienes que arriesgarte a perderla.” – Neil Strauss


Si quieres ponerte a prueba esta semana en plan extremo, te recomiendo que salgas ahí fuera con el objetivo de fracasar. Sal de tu zona de comfort. Haz locuras, dando ya por hecho que vas a ser rechazado… y disfruta el rechazo. Tira tu última línea de defensa y abrázate al fracaso. Sea cual sea el punto en el que estés, arriesga para fallar. A las próximas 20 chicas con las que hables: si te cuesta pedir el teléfono, pídeles a todas el número. Si eres incapaz de acercarte a ellas a conocerlas, camina y hazlo. Si te cuesta el contacto físico, tócalas desde el primer instante. Si tienes miedo de que se rían de ti, intenta que se rían de ti. Si te avergüenza que te mire la gente, hazlo para que te miren. Si temes que te miren con cara extraña, provoca que lo hagan. Si no te decides a llamarla cuando tienes el número, llámalas. Si no te atreves a besarla, hazlo… Entonces te darás cuenta de una valiosa lección…


¿Por qué James Bond es tan bueno en su trabajo? Porque se juega la vida cada segundo, porque está dispuesto a morir. La canción de Chris Cornell – You know my name dice: “Are you willing to die?”. En español: “¿Estás dispuesto a morir?” Al agente secreto 007, no le tiembla el pulso si le apuntan con un arma. Si las balas le rozan silbando. Le da igual que su vida corra peligro. Se abraza a la muerte. Siempre anda al límite, bailando con ella, jugando, coqueteando. Y vive junto a ella en cada aventura. Está preparado, dispuesto a morir. Que no es lo mismo que deseando morir.

Te acercas a una chica desconocida para conocerla y ella responde negativamente… No tienes que buscar una respuesta que salve tu ego. No tienes que quedar por encima. No te afecta. Tú sonríes e incluso te ríes de ti mismo. Da igual, sigues siendo tú!!

Le escribes un mensaje o la llamas, y ella no responde… No te pones a darle vueltas. Abrazas el fallo. No te afecta. Perfecto, otra vez será. Aceptas y sigues tu vida, llamas a la siguiente chica Bond de tu agenda.

Invitas a una chica a una cita y ella no viene… Te da igual. Sigues disfrutando tu vida.

Te acercas a besar a una deliciosa mujer que parecía ya en tus brazos y ella se aparta… Bond simplemente sonríe. Y sigue como si nada. Pronto estaremos juntos, seguro. Y si no, ¿qué más da? 😎

No es “Ella se lo pierde”, ni “Yo soy el premio”. La pérdida es de los dos. Tú también te lo pierdes!! Ella es una chica fantástica y tú querías estar con ella!! Tú ofreces tu magia y si ella la disfruta, maravilloso. Y si no, no has perdido nada!!

Quita tu ego de la ecuación. Responde, ¿realmente haces esto por ti o por los dos? Cuando te afecta y sólo quieres quedar por encima de ella o salvar tu orgullo, es cuestión de tu ego. Y seguramente sólo estabas pensando vanidosa o egoístamente en TI. En subir tu ego, en ganar un trofeo, en presumir de la hazaña… en conseguir algo de ella, en lugar de compartir una experiencia con ella. Si realmente lo haces por los dos, si la amas de verdad, si deseabas ofrecer una aventura compartida, no te queda ese mal sabor de boca. Su rechazo simplemente es un “no… todavía y no te lo tomas nada seriamente, tu interés en ella no cambia absolutamente nada. Sabes que probablemente ella tarde o temprano acabará aceptando. 😉

No te tomes tan seriamente, tan sólo párate, detén el tiempo, mira alrededor toda la belleza que hay, toma aire profundamente y expúlsalo lentamente, relájate, disfruta la vida. Escucha la música y baila…

Y recuerda: deja de medir tu éxito o tu fracaso por las reacciones que obtienes de las mujeres y empieza a medirlo por cómo tú te presentas en el mundo y en la interacción. ¿Me he acercado a hablar con ella o el miedo me ha paralizado? ¿He mostrado quién soy realmente o me he acobardado? ¿He hecho justamente lo que quería o me he reprimido? ¿He jugado a lo grande o he ido a lo seguro? ¿He sido auténtico, divertido y yo mismo? ¿He amado a las mujeres y a ésta en concreto en esta interacción? ¿He cumplido con mi parte como hombre? ¿He dicho mi verdad?

2 comentarios sobre “Abrázate al fracaso

Deja un comentario